Los picamos y los guardamos en bolsas para el congelador. Así, cuando queramos guisar carne o echarlos en la pizza durante el resto del año, ¡tendremos pimientos del huerto! No hace falta que cuando lo vayas a usar lo descongeles antes, nosotros lo echamos directamente y con el calor de la cocina se descongela. Y ya que estamos, aprovechamos para enseñaros un cierre para el congelador reutilizando botellas de plástico. Lo aprendimos en el blog de comparte tus ecoideas que por cierto, tiene cosas muy chulas. Es muy sencillo, sólo tienes que recortar la parte superior de la botella, quitas el tapón y metes la bolsa, quedando la boca de la botella como un anillo en la bolsa. La doblas tapando la botella y cierras con el tapón. Nosotros lo usamos mucho, sobre todo para congelar masa de pizza que nos sobra, pero ya ves que sirve para cualquier cosa.
Se mete menos hielo que con las pinzas para bolsas de congelados?
ResponderEliminarPues a nosotros nos gusta mas sobre todo porque no se abre que con las pinzas hay veces que se quita y entra mucho hielo.
ResponderEliminarAdemás, con los tapones estas reutilizando material de desecho. Muy buena idea Irene, ya lo estuvo utilizando. Un abrazo!
ResponderEliminarMe alegro Ortega! Y gracias por visitarnos!
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